La preparación de las Flores de Bach para los niños que asisten a los Campamentos de verano de Estimulación Infantil, se convierte un año más, y este es el doceavo, en un momento especial para mi, siempre lo he vivido como una manera especial de divulgar y acercar a los niños los remedios del doctor Bach.
En los campamentos la mayoría de los goteros tienen las mismas flores, todo y que algunos son diferentes pues son para niños que las toman habitualmente y atiendo a sus características específicas.
La toma de Flores de Bach, tanto en niños como en adultos, sigue en aumento, son una excelente forma de acompañar y ayudar al equilibrio de los diferentes estados de ánimo y lograr una armonía emocional.
Son fáciles de administrar y ofrecen al niño la capacidad de adaptación a las situaciones nuevas, una mayor tolerancia a la frustración, le permiten estar contento y en paz, potencian y fortalecen sus propios recursos internos.
La formulación general en los frascos para los niños de los campamentos tiene cinco remedios, son los siguientes:
Impatiens, el primero de los remedios que descubrió el doctor Bach, para tener y llevar un ritmo adecuado en sus actividades, aportando calma y capacidad de espera.
Es una planta originaria del Himalaya que crece cerca del agua, sus flores son rosadas. Aporta paciencia, tolerancia y reduce la impulsividad, mejorando la capacidad de empatía.
Walnut, es el nogal, les ayuda a adaptarse a la casa de colonias y a las actividades que realizan a lo largo de todo el día, para vivir los cambios desde la seguridad y la confianza. Es la flor de Bach para ayudarnos en cualquier proceso de cambio, procesos relacionados con nuestro entorno y con nosotros mismos.
Chestnut Bud, el remedio por excelencia para mejorar las dificultades en los aprendizajes, la asimilación y la comprensión en las actividades y también la capacidad de observación. Este remedio se prepara por ebullición con los brotes del Castaño de Indias, otra de las flores de Bach, White Chestnut, y ayuda a responder con alegría ante la dificultad de los aprendizajes.
Scleranthus, favorece la integración a nivel de los hemisferios cerebrales, aporta serenidad, da resolución y también equilibrio. Es una flor muy pequeña de color verde, una pequeña corona de cinco puntas, descubierta por el doctor Bach en 1930, que nos aporta equilibrio ante la oscilación constante.
Y por último
Larch, para fortalecer la confianza en sí mismos, aportar seguridad y potenciar sus capacidades, ayudarles a descubrir su potencial y a superar la baja tolerancia a la frustración. Se trata de un árbol peculiar, todo y que pertenece a la misma familia que los pinos y los abetos, sus hojas son caducas, ayuda a responder con seguridad a los retos que nos presenta la vida.
En los campamentos la mayoría de los goteros tienen las mismas flores, todo y que algunos son diferentes pues son para niños que las toman habitualmente y atiendo a sus características específicas.
La toma de Flores de Bach, tanto en niños como en adultos, sigue en aumento, son una excelente forma de acompañar y ayudar al equilibrio de los diferentes estados de ánimo y lograr una armonía emocional.
Son fáciles de administrar y ofrecen al niño la capacidad de adaptación a las situaciones nuevas, una mayor tolerancia a la frustración, le permiten estar contento y en paz, potencian y fortalecen sus propios recursos internos.
La formulación general en los frascos para los niños de los campamentos tiene cinco remedios, son los siguientes:
Impatiens, el primero de los remedios que descubrió el doctor Bach, para tener y llevar un ritmo adecuado en sus actividades, aportando calma y capacidad de espera.
Es una planta originaria del Himalaya que crece cerca del agua, sus flores son rosadas. Aporta paciencia, tolerancia y reduce la impulsividad, mejorando la capacidad de empatía.
Walnut, es el nogal, les ayuda a adaptarse a la casa de colonias y a las actividades que realizan a lo largo de todo el día, para vivir los cambios desde la seguridad y la confianza. Es la flor de Bach para ayudarnos en cualquier proceso de cambio, procesos relacionados con nuestro entorno y con nosotros mismos.
Chestnut Bud, el remedio por excelencia para mejorar las dificultades en los aprendizajes, la asimilación y la comprensión en las actividades y también la capacidad de observación. Este remedio se prepara por ebullición con los brotes del Castaño de Indias, otra de las flores de Bach, White Chestnut, y ayuda a responder con alegría ante la dificultad de los aprendizajes.
Scleranthus, favorece la integración a nivel de los hemisferios cerebrales, aporta serenidad, da resolución y también equilibrio. Es una flor muy pequeña de color verde, una pequeña corona de cinco puntas, descubierta por el doctor Bach en 1930, que nos aporta equilibrio ante la oscilación constante.
Y por último
Larch, para fortalecer la confianza en sí mismos, aportar seguridad y potenciar sus capacidades, ayudarles a descubrir su potencial y a superar la baja tolerancia a la frustración. Se trata de un árbol peculiar, todo y que pertenece a la misma familia que los pinos y los abetos, sus hojas son caducas, ayuda a responder con seguridad a los retos que nos presenta la vida.
Impatiens
Texto y fotografía: Pilar Vidal Clavería
Terapeuta floral
Counseling integrativo-relacional de duelo y pérdidas
Las
informaciones sobre les Flores de Bach que aparecen en los artículos
son únicamente de carácter orientativo e informativo. Cada niño
necesita un tratamiento individualizado, que debe ser prescrito por
un terapeuta floral acreditado.